Testimonios
Los pacientes cuentan su experiencia tras la terapia visual en Aprendiendo a Ver. Ellos comprobaron que, con un tratamiento adecuado, sus problemas visuales tienen solución.
A.M.
A.M, paciente de 7 años, con estrabismo convergente. Lleva usando gafas y parche desde los 15 meses, a los 3 años la operaron de estrabismo. Cuando le hice la evaluación pude comprobar que aunque los ojo estaban aparentemente rectos, en todas las pruebas de visión binocular, A, suprimía un ojo, es decir, mantiene los ojos rectos, pero a nivel funcional sólo usaba uno. Por eso, cuando se quitaba las gafas el ojo se le seguía metiendo para dentro. Tras el tratamiento con fototerapia y terapia visual activa, A.M, aprendió a usar los dos ojos a la vez, ganando así visión tridimensional (por eso ella pone que hacemos cosas mágicas) y eliminando por completo su estrabismo.
C.B.
Esta es la experiencia de una de niña con estrabismo convergente (metía el ojo hacia dentro).
Estuvo usando parche desde los 3 hasta los 10 años. Gracias a la terapia visual comportamental consiguió eliminar el estrabismo teniendo siempre los ojos rectos.Ahora tiene buena visión binocular y ¡ha desarrollado visión en 3D!.
Sus palabras: “estoy arrepentida de no haber descubierto antes la terapia visual” “La terapia visual me ha cambiado la vida”.
C.G.
C.G, paciente de 10 años derivada por el oftalmólogo por presentar un microestrabismo y ambliopía. En tan sólo 3 meses de terapia visual conseguimos eliminar la desviación, mejoramos la ambliopía de un 60% a un 90%, ademas, y lo más importante es la mejora en su calidad de vida, ya que empezó a tener gusto por la lectura, y mejoró de manera muy significativa su rendimiento deportivo.
E.R.
E.R de 16 años que viene recomendada por una psicóloga infantil. Sus resultados en el colegio son buenos, pero no acordes con el esfuerzo que hace. Antes de iniciar la terapia visual, era una niña insegura y sabía que en cada examen que hacía que no daba lo mejor de ella. Al hacerle la evaluación completa (eficacia visual y percepción), descubrimos que tenía un problema binocular en visión cercana.
E.R presentaba una insuficiencia de convergencia, lo que le impedía concentrarse en tareas cercanas durante largos periodos de tiempo. Además de unos bajos percentiles en la memoria visual a corto y largo plazo.
Tras unos 5 meses de terapia visual, E.R, mejoró por completo su visión binocular y convergencia.
E.R consiguió sus objetivo, estudiar durante largos periodos y que no sea algo agotador.
G.M.
Esta es la experiencia contada por un paciente muy especial con el que yo también aprendí mucho, cada día con él era un reto nuevo, siempre venía con una sonrisa y dispuesto a trabajar. Él mismo cuenta perfectamente su historia y su paso por la clínica.
M.C.
Esta es la experiencia desde el punto de vista de una madre guerrera. Su hija adolescente y bastante presumida tiene un estrabismo convergente (ojo se le desvía hacia dentro). Desde pequeñita ha estado usando gafas y parche, alternado las oclusiones de un ojo a otro. Incluso cuando vino a mi consulta, ya con 10 años, mantenía el mismo tratamiento: “usar parche”.
La madre llevaba años sin observar cambios. Su hija que iba creciendo y su ojo seguía igual. El estrabismo ya le empezaba a afectar en las relaciones personales con sus amigos y amigas. La madre empezó a ver cómo su hija se acomplejaba por su estrabismo y dejaba de hacer planes.
Desesperada por cambiar la situación decidió traerla a terapia visual, y con mucho éxito conseguimos eliminar el estrabismo tanto la parte estética, como la funcional.
I.A.
I.A, fué una de mis primeras pacientes cuando abrí la clínica, y no sólo eso hizo especial trabajar con ella. I.A llevaba mucho tiempo incomoda con su visión, sabía que algo pasaba pero nadie le daba una solución salvo, taparse un ojo o cambiar constantemente de gafas. Recuerdo que tras hacerle la evaluación, se quedo viendo doble y con mareo duante un largo tiempo, algo para mi completamente normal, ya que tenía una visión binocular muy débil. Por eso podía entender porqué rendía tan poco en el trabajo, era tan torpe en los deportes y en la conducción. ¿Os imagináis como te puedes sentir si todo lo que haces te cuesta o te sale mal por un problema visual?
Tras unos 8 meses de terapia visual I.A., desarrollo una buena visión binocular y por tanto su vida cambió por completo.